EDIFICIO COMERCIAL RIANAL

En pleno centro histórico y comercial, y respondiendo a un estricto planeamiento mercantil, la estructura resuelve suficientemente las necesidades de flexibilidad y diafanidad, amplios escaparates, que se transforman en pasaje, integran espacio urbano y comercio y toda la voluntad arquitectónica pasa a concentrarse en la fachada. En un momento de importante sustitución del caserío, de ganas y voluntad de renovación estética, la fachada asume esa condición publicitaria de modernidad arquitectónica y empresarial. Elemento singular en la ciudad, refuerza su carácter emblemático con la incorporación provocativa de materiales ajenos, granito verde, gracias a la tridimensionalidad de su piel, presente en la visión siempre sesgada de las estrechas calle, y mediante el poderoso dosel que a modo e gran cornisamento remata la fachada. Referencias a las vanguardias históricas y a arquitecturas italianas reconocibles en una obra de gran abstracción.