Mezcla de influencias racionalistas y clasicistas, muy en la línea de la época.
Unifica el pragmatismo funcionalista y un eficaz dominio del clasicismo moderno depurado que se había oficializado.
EL proyecto primitivo concebía un edificio de mayor longitud y regularidad. En el segundo se lleva a cabo el diseño de un doble cuerpo con un ligero desplazamiento que ayuda a enmarcar el espacio del acceso principal.
En el proyecto definitivo se dividen las sucesivas plantas con arreglo a la necesidades de oficinas y despachos, incluyendo como excepción una vivienda y la terraza de un bar.
Rehabilitado por J. Jiménez Mata en 1990.